En el vasto y diverso paisaje de Latinoamérica, Lagunillas, una ciudad en Venezuela, se distingue por una característica geográfica única: es la ciudad más baja de la región, situada a 8 metros bajo el nivel del mar. Esta localidad, conocida por su pasado petrolero, se encuentra en el estado de Zulia y ha sido históricamente un punto clave en la industria del petróleo. El Puente General Rafael Urdaneta, que se extiende por 9 km, conecta las dos costas del lago Maracaibo cerca de Lagunillas, destacando la importancia estratégica de la ciudad.
El perfil de Lagunillas es también un testimonio de la historia colonial de Venezuela. En la época colonial, el lugar era conocido como Paraute, debido a que allí desemboca el río del mismo nombre. Hoy en día, la ciudad no solo es reconocida por su altitud negativa sino también por su rica herencia cultural, que incluye la presencia de comunidades indígenas como los quiriquires y paraujanos, que han habitado la región desde tiempos precolombinos. Lagunillas, con su singularidad geográfica y cultural, es un ejemplo fascinante de la heterogeneidad de Latinoamérica.
Fuente de imágen: Clarin.com