Con solo 50 metros de longitud y declarada Monumento Natural, esta preciosa playa se encuentra ubicada en Austrias y su nombre es Gulpiyuri.

Un dato curioso es, que sus aguas cristalinas no son las que hacen especial a esta playa, sino su particular ubicación, puesto que la fuerza del mar cinceló la costa acantilada de roca caliza que rodea, a día de hoy, la playa hasta crear cavernas bajo el suelo. Sin embargo, este techo se hundió y, desde entonces, el mar Cantábrico se cuela a través de un agujero de 50 metros entre dos rocas, conectado Gulpiyuri con la costa.

Visitar Gulpiyuri brinda a los turistas una conexión increíble con la naturaleza, ya que no es la tipica playa donde vas a tomar el sol y bañarte entre sus olas, pues carece de ellas y de profundidad.

Fuente de imagen: Turismo Austrias.